lunes, 5 de octubre de 2015

@velasquezkarina Basta de vivir con miedo

[COMUNICADO]
Para todos los venezolanos
Hoy quiero compartir con ustedes no mis nuevos proyectos profesionales, ni lo feliz que me siento al ver cómo ha crecido el cine nacional. Lamentablemente, en esta ocasión, les escribo desde el dolor y la tristeza que siento por la situación que vivimos en mi país. Por esa angustiosa realidad que se ha vuelto la protagonista de Venezuela. Estas líneas que pensé una y otra vez, nacen de una venezolana que padece como ustedes cada uno de nuestros problemas. Por eso, me permito desde el corazón, invitarlos a reflexionar, a recobrar la conciencia, el sentido común, a abrazar la paz y recuperar el respeto por la vida. Es el momento.
Mirando hacia atrás, no encuentro cuándo fue que dejamos perder nuestra esencia como venezolanos. Cuándo la sonrisa para el otro se transformó en miedo y la solidaridad se convirtió en egoísmo. En mi deber y derecho como ciudadana, trabajadora y madre, quiero expresar lo que siento, lo que me pasa y todo lo resumo en una palabra: ¡basta! Basta de tanta inseguridad, de tanta violencia. Nuestra vida no puede valer más que un celular o un par de zapatos. Nosotros no deberíamos tener precio. ¿Cuánta gente más tiene que morir en manos del hampa para que lo entendamos?
Hace un año fui víctima de la delincuencia. Nadie se salva. Unos sujetos entraron a mi casa y sin pensarlo dos veces, se llevaron todo por lo que había trabajado durante años. Convencidos de que es más fácil arrebatar pertenencias que salir a la calle y con esfuerzo, ganarlo honradamente. Por fortuna no me hicieron daño, pero el miedo sigue. Mi madre también repetidas veces ha sido sorprendida por bandidos en la calle. Con armas, apuntada, terminó preguntándose en muchos momentos si ese sería su final. Es una historia de horror que cada vez sufren más venezolanos.
Basta que mueran personas inocentes, luchadoras, respetuosas, con aspiraciones, que salen diariamente a cumplir sus sueños y a ayudar a otros.
Basta, porque nadie merece morir en manos de la delincuencia.
Basta de salir a la calle con desasosiego sin tener la certeza de regresar a casa.
Basta de obligarse a pensar con malicia y desconfiar de la gente.
Basta de vivir con miedo.
Basta de ser una triste referencia de problemas en todo el mundo.
Basta de que las autoridades no sean competentes y no velen por nuestra seguridad.
Creo que hay tantas cosas a las que tenemos que decir basta, que no alcanzo a apuntarlas todas. Pero, sobre todo, basta de tanta indiferencia. El peor error que podemos cometer como sociedad es ignorar tantos problemas, no sentirnos motivados a cambiar nuestra realidad y, por el contrario seguir alimentando tanta maldad y mediocridad.
Mi aspiración igual que ustedes es vivir en una Venezuela fuera de peligros. Donde no haya espacios para la violencia. Un país donde tú sueñes, tú trabajes, tú ahorres, tú construyas. Un lugar donde no me sienta sola, desprotegida, huérfana. Una nación que invite a quedarse.
Por supuesto, un país donde la gente no sea indiferente, donde exista el respeto por el otro y donde la tolerancia sea la virtud más recurrente. Y sé que para serlo, sólo nos hacen falta las ganas de querer hacerlo. De sentir que podemos lograrlo, pero sobre todo, estar muy dispuestos a alcanzarlo.
Creo en mi disposición y en la de muchos de ustedes. Es un asunto de voluntad, de exigencia con nosotros mismos. Aspirar y crear un mejor país debe ser nuestra meta. Lo necesitamos nosotros y nuestros hijos.
Karina Velásquez

No hay comentarios:

Publicar un comentario